Salar de Uyuni, Todo lo que necesitas saber para explorar el desierto de sal.

Si deseas conocer uno de los lugares más espectaculares de Sudamérica, debes viajar hasta Bolivia y visitar el Salar de Uyuni, el más extenso de todo el mundo, con una extensión de 10.582 km² y con la mayor reserva de litio del planeta (se calcula que acumula entre el 50-70 % del total de litio mundial) y a 3.600 m sobre el nivel del mar.

La sensación de caminar sobre la sal, el crepitar de esta bajo los pies, ese horizonte inacabable, continuo y lejano, que enmarca el azul intenso del cielo, nubes que parecen nacer de la tierra y extenderse por la bóveda celeste y ese blanco infinito que se vuelve un espejo gigantesco con la llegada de las lluvias. Y, cómo no, el silencio, un silencio absoluto que solo se rompe con el sonido del viento. No hay nada igualable a la sensación que provoca el salar de Uyuni.

Viajar al Salar de Uyuni es una experiencia transformadora, un encuentro directo con la inmensidad de la naturaleza. Ya sea que busques reflejos hipnóticos o paisajes extraterrestres, este rincón de Bolivia te regalará recuerdos imborrables. Prepárate bien, viaja con respeto y déjate asombrar por uno de los lugares más extraordinarios del planeta.

Su historia geológica lo sitúa en dos ocasiones bajo el agua. Hace 40000 años, el área que a día de hoy ocupa el salar, estaba cubierta por el lago Minchin, y más tarde, hace unos 11000 años, por el lago Taucao. Durante este período, la zona se encontraba en una fase de clima húmedo, pero a esta fase le siguió un período cálido y seco que, junto con el aumento de la actividad volcánica, provocaron la evaporación de gran parte de estos lagos andinos, originando los salares de Uyuni, Coipas y las lagunas que encontramos dentro de la Reserva Nacional de Fauna Andina Eduardo Avaroa (frontera con Chile y Argentina). 

La desecación hizo que la sal contenida en las aguas de estos lagos se fuera depositando y con el tiempo solidificándose hasta conformar las extensiones de capas blancas del altiplano boliviano. Se calcula que contiene unos diez mil millones de toneladas de sal y que está formado, por unas 11 costras de sal, de dos a 10 metros de espesor cada una, entre las cuales llega a acumularse el agua de la lluvia y que más tarde es convertida en salmuera, que con el calor del interior, intentará salir a la superficie, rompiendo la sal y creando unas fracturas de formas hexagonales en el suelo.

La particular belleza de este lugar se la dan las formas poliédricas de sal que el viento ha ido creando a su paso y que contrastan con el azul del cielo, así como las islas y montañas que aparecen en medio de este mar de sal. 
De esas islas cabría destacar dos, la Isla del Pescado y la de los Pescadores.

La isla del pescado o Cujiri, ocupa unas 100 hectáreas dentro del salar. Está formada por granito y tierra, lo que ha permitido que se desarrolle una especie de cactus gigante que puede alcanzar hasta 6 m. de altura, increíble verdad. En esta isla incluso podemos encontrar una cueva desde donde es posible apreciar las distintas capas geológicas del suelo del salar, y además conseguir unas vistas únicas de toda la zona. 

La segunda, la isla Incahuasi (la casa del inca), es quizás una de las más fotografiadas, porque en ella los gigantescos cactus como los quirucuolumbar, la pillaya, el thulo, o la añaguaya, pueden llegar a alcanzar los 10 m, e incluso se dice que alguno de ellos puede tener más de 1000 años de antigüedad. Esta isla mágica, de origen volcánico, parece emerger del interior del desierto blanco, dando resguardo a los restos arqueológicos importantes de la cultura tiwanakota e inca, además de contar con cavernas, grutas y túneles.

¿Cuál es la mejor época para ir al salar?

La climatología del salar de Uyuni se divide en dos estaciones: la seca y cálida, y la fría y húmeda.
Si lo visitas entre los meses de mayo a noviembre (estación fría), disfrutarás del blanco impoluto de la sal en contraste con el cielo cobalto. La mejor época es quizás los meses comprendidos entre junio y septiembre. Las lluvias son más escasas o inexistentes, por lo que los cielos se ven siempre limpios y brillantes. El único inconveniente es el frío. El promedio de temperaturas máximas en esta época puede superar los 10 °C, mientras que las noches son muy frías, pudiendo descender hasta los -15 °C.

Si, en cambio, decides visitarlo durante los meses de enero y febrero, el paisaje puede cambiar completamente. Empieza la temporada cálida y lluviosa. Es la época en la que el salar se ve como un inmenso espejo en el que las nubes se reflejan en la tierra, provocando ilusiones ópticas casi mágicas. Durante esta estación, las temperaturas máximas se sitúan alrededor de los 16 °C, mientras que las mínimas se acercan a los -3 °C

Si lo visitas en esta época del año, debes tener en cuenta que en función de la lluvia puede haber zonas del salar que queden completamente inundadas y por consiguiente que sea imposible visitarlas, y además los cielos pueden estar cubiertos, por lo que la belleza del salar puede quedar algo mermada.

Qué me pongo si quiero visitar el Salar

En BlackPepper disponemos de varios viajes en grupo que cuentan con unos días en el salar, así como diferentes rutas a medida. En nuestros viajes acostumbramos a pasar de 3 a 4 días visitando esta zona, tanto el salar como los volcanes y lagunas del Parque.

Nuestros viajes en grupo coinciden habitualmente con la época fría y seca, por lo que las temperaturas nocturnas pueden ser muy bajas, así que es recomendable ir bien equipados. Pantalón largo, gorra, protector solar, alguna pieza de abrigo e incluso guantes.  Aunque las temperaturas diurnas son más suaves, si sopla viento, la sensación térmica puede descender rápidamente.

Si pasas la noche en hotel, como es el caso de nuestros viajes en grupo, las noches serán mucho más agradables que si te decantas por la opción de dormir en tienda de acampada. En ese caso no olvides llevar un saco que soporte temperaturas inferiores a los 15 °C bajo cero.

Atención a la altitud

El Salar de Uyuni está a más de 3.600 metros sobre el nivel del mar. Si no estás acostumbrado a la altura, podrías experimentar mal de altura. Para evitarlo, aclimate en ciudades como La Paz o Potosí antes de visitar el salar. Mantente hidratado, evita comidas pesadas y habla con tu médico, antes de viajar, por si es recomendable que tomes algún medicamento en caso de necesidad.

Respeta el entorno

El Salar de Uyuni es un ecosistema único y frágil. Sigue siempre las indicaciones de las guías y evita dejar basura o alterar el entorno. Disfrutar de la naturaleza también implica cuidarla para que las futuras generaciones puedan maravillarse igual que tú.

No olvides llevar en tu mochila

• Cámara fotográfica o teléfono inteligente: El salar es un paraíso para la fotografía. Si viajas en la temporada de lluvias, considera llevar un trípode para captar los reflejos.
• Baterías extra y power bank: El frío drena rápidamente las baterías, y las estaciones de carga son escasas. Pero sobre todo, cuando veas lo espectacular que es, no podrás dejar de hacer fotos. Deja correr tu creatividad, pueden salir grandes momentos para recordar y fotografiar.
• Protector solar y gafas de sol: Al encontrarnos a una altura de unos 5000 m sobre el nivel del mar, el riesgo de exposición solar es elevado, por lo que es indispensable el uso de protector solar y gafas de sol para atenuar el reflejo de la luz sobre el blanco de la sal.

Si te apetece disfrutar de esta maravilla de la naturaleza, no dejes de echar un vistazo a todas las rutas que el equipo de BlackPepper ha diseñado por este rincón del mundo. Una gran variedad de aventuras, tanto en grupo como a medida, para que vivas una experiencia extraordinaria en el lugar donde el cielo y la tierra se funden.